Por Cristhian
Salazar
Al puro estilo de la
delincuencia organizada, PAN y PRD quieren calentar la plaza para su
conveniencia. Siembran odio y encono, para generar las condiciones de un
conflicto post electoral. Calderón sabe que su partido está perdido, y la única forma de conservar el
poder, es mediante la anarquía y un golpe de Estado.
En 2006, la derecha panista y
la IP organizaron toda una campaña de odio en contra de López Obrador, a quien hicieron ver como el "peligro para
México". El resultado de
esa propaganda, fue una fractura social y un conflicto que pudo haber llegado a
consecuencias lamentables. Finalmente, Vicente Fox logró imponer a su sucesor y con ello suplantó la voluntad del pueblo.
Hoy, Don Felipe Calderón trata de hacer exactamente lo mismo, imponer a su
candidata, desprestigiando y calumniando al candidato puntero, Enrique Peña Nieto, despojando al pueblo de su legítimo derecho de elegir al Presidente.
Es lamentable, que también la izquierda
representada por AMLO, se preste a esta cruzada de odio, después de haber sido él mismo víctima de las calumnias del PAN. Es evidente la decadencia y
descomposición a la que ha llegado la
izquierda mexicana, que se ha convertido en una fuerza electorera y tramposa.
López Obrador le hace el caldo gordo a Josefina, prestándose a este juego sucio, pero además está cometiendo el mismo pecado
que tanto le señaló a Vicente Fox, lo cual le resta al Peje credibilidad y
legitimidad.
Sin embargo, las cosas no le
han salido nada bien al habitante de los Pinos, su candidata, lejos de crecer, se encuentra en crisis por
la ineptitud de su equipo de campaña. Además, Peña Nieto hasta ahora parece
imbatible, inmune a los ataques de sus detractores. Cuando lo acusan, Peña se defiende y sale ileso; cuando lo calumnian, Peña desmiente con pruebas y su popularidad crece.
El debate era una de las pocas
esperanzas que les quedaban a Josefina y al Peje para ganar algunos puntos,
pero ambos se perdieron entre acusaciones sin sustento y lloriqueos que no
influyeron para nada en los electores.
Ni siquiera el incidente de la
Ibero, que fue claramente montado por gente de López
Obrador, pudo restarle puntos al candidato del PRI, que sigue muy arriba en
todas las encuestas decentes.
Para este día, se está convocando a una marcha
"anti Peña" en todos los estados
de la República, sin duda un ejercicio
de intolerancia que nada tiene que ver con la democracia. No se trata de una
manifestación legítima de algún sector de la sociedad, se
trata de un montaje perverso, con complicidad del PAN y del PRD, para tratar de
destruir a un candidato que está ganando con todas las de la
ley.
Calderón, Josefina y su nuevo alcahuete AMLO, están sembrando odio entre los mexicanos, que no quieran
cosechar rosas. Van a cosechar el repudio de la mayoría del pueblo, que quiere y exige un cambio de rumbo para el
país, un cambio responsable,
lejos de las dos posiciones radicales que representan el PAN y el PRD: una
derecha retardataria y autoritaria, y una izquierda sin proyecto y sin visión de Estado.
La voluntad del pueblo es
evidente. La mayoría estamos cansados de este régimen de miedo. Hacer campañas
de odio, es pensar que los mexicanos no tenemos capacidad para elegir, para
discernir entre las opciones de gobierno; es creer que los ciudadanos somos
seres autómatas sin voluntad. Pero todo
lo contrario, los mexicanos estamos listos para elegir al mejor candidato, y
sobre todo, estamos listos para defender nuestro voto y evitar que una camarilla que se cree dueña de México, nos imponga a una mujer de paja, que no tiene
ni idea de cómo se gobierna un país.
Lameculismo epico. Para la historia.
ResponderEliminarCARAMBA!, SE NOTA UNA DESESPERACION DESMEDIDA Y FALTA DE INFORMACION EN ESAS LINEAS!! AMLOISTAS NO PROMOVIMOS NI ASISTIMOS A ESA MARCHA! INCLUSO NOS DESLINDAMOS!, QUIEN ASISTA LO HACE BAJO SU PROPIO CRITERIO!, COSA VALIDA? O NO?, SE NOTA QUE EN EL AUTORITARISMO DEL PRI, NO CABEN CRITERIOS PARTICULARES!, LASTIMA!, PERO BUENAS NUEVAS!, AMLO PRESIDENTE!!!
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